
Aprovechemos esta ventaja... mediaticemos nuestra demanda. La paz es nuestra, exijámosla, va a ser fácil, empecemos. Sólo hablemos de ella como un valor que algunos creen que sigue siendo.
El aceite es, desde tiempos remotos, parte del canchero porte de poderosos. Estuvo en las cocinas de lo sagrado, lo mítico, en fin, lo que no tiene explicación. Es el producto que según los libros de historia de Capeluz hirvió y nos llenó de personalidad arrolladora frente a los ingleses.
¿¡Que Cosa el aceite no!? Telefunes y Rony no se imaginaban que ese producto de supermercado, construido de elogios en ese taxi que tomé en Bv. los Granaderos, iba a ser la causa de disputa y diferencia entre los que sueñan con poder y los que inventan personalidades y siglos después la pierden.
Yo tengo una respuesta… El aceite pertenece a lo que prefiere no explicar nada. No hay un por qué… Pero si una invitación: Llegate a la finca de Francisco Telefunes y probá el mejor aceite !!!